De celulares y algo más

Muchas veces, al querer adquirir un producto nuevo (sobre todo tecnológico: cámaras digitales, celulares, etc.), uno realiza un simil trabajo de investigación sobre el aparato en cuestión. Por lo general, uno empieza viendo los más caros (como si esto fuese sinónimo de mejor) y termina entre los dos mas bonitos, haciendo una comparación de características.

A modo de ejemplo:


Luego de comparar algunas funciones como "Memoria interna" o "Peso", por demás irrelevantes, uno escoge. Pero lo cierto es que este tipo de cosas publicadas por las empresas productoras solo hacen pensar al consumidor en lo innecesario. Si se analiza con lógica, a esa tabla presentada anteriormente, habría que agregarle otras cosas como "Resistencia a los golpes", "Probabilidades de supervivencia ante caída al inodoro" o hasta incluso "Comodidad en la mano" o "Probabilidades de que te lo afanen".

Por eso, la próxima vez que necesites algo, pensá bien si realmente necesitas un Iphone o si con tu querido Nokia 1100 podés vivir feliz y tranquilo.